Francisco Pavón recuerda a Julio Moya: Leyenda inmortal del pitcheo nicaragüense
La comunidad deportiva de Nicaragua tendrá grandes recuerdos tras la partida física del legendario lanzador Julio Moya, quien falleció el pasado 4 de julio de 2025 a los 69 años de edad. Su nombre, sin embargo, seguirá vivo en la memoria de los amantes del béisbol, gracias a sus hazañas dentro del diamante.
“Julio fue un guerrero del montículo. Lo que hizo en Los
Ángeles fue algo que solo las leyendas pueden lograr”, expresó Pavón con
admiración.
Julio Moya, originario de La Fuente, una comunidad rural del
municipio de La Paz Centro, en el departamento de León, escribió capítulos
dorados en la historia del béisbol nacional. Como lanzador del equipo León y de
la selección nacional, fue sinónimo de coraje, entrega y dominio absoluto desde
la lomita.
Entre sus logros más memorables se destaca la temporada de
1984, cuando conquistó la codiciada Triple Corona del pitcheo nacional: acumuló
12 victorias, apenas 2 derrotas, propinó 95 ponches y dejó una asombrosa
efectividad de 0.14, permitiendo únicamente dos carreras limpias en toda la
temporada.
No obstante, para el propio Moya, su año más especial fue
1983, temporada en la que registró una impresionante marca de 21 triunfos y 3
derrotas, con 1.85 de efectividad, igualando el récord nacional de nueve
blanqueadas. Ese año completó 20 juegos en 24 aperturas, lanzando un total de
199 episodios.
La figura de Julio Moya trasciende generaciones. Su legado
queda grabado en la historia del deporte nacional como uno de los más grandes
lanzadores que ha dado Nicaragua. Su brazo poderoso y su humildad fuera del
terreno lo convierten en una leyenda eterna.
Entrevista completa con Francisco Pavón Pineda: